ANATOMÍA DEL CEREBRO
Cada parte distinta del cerebro desempeña un diverso papel en permitir que los seres humanos tengan pensamientos y las memorias, que se muevan sus armas y tramos, olor del sentido, mira, audiencia, tacto, y gusto, así como que mantengan las funciones de muchos órganos dentro de la carrocería.
Divisiones del cerebro
El cerebro humano se puede dividir a menudo en tres porciones distintas, que incluyen el cerebro, el cerebelo, y el médula oblonga.
El cerebro
La porción mayor del cerebro es el cerebro, que divide los hemisferios cerebrales izquierdos y derechos, que tienen dobleces numerosos y circunvoluciones presentes en su superficie. Entre estas circunvoluciones son las cumbreras conocidas como convoluciones del cerebro. Las pequeñas ranuras que están presentes entre las convoluciones del cerebro se conocen como el plural del surco o de surcos, mientras que ranuras más grandes se refieren como grietas.
Los hemisferios cerebrales correctos e izquierdos, que se revisten en la corteza cerebral que se conoce de otra manera como materia gris, son ensamblados juntos por el callosum de la recopilación. Considerando que el discurso de los mandos del hemisferio izquierdo y el pensamiento abstracto, el hemisferio correcto controla el pensamiento espacial.
Los lóbulos frontales, parietales, temporales, y occipitales son los cuatro lóbulos que componen el cerebro. Los lóbulos frontales, que están presentes directamente detrás de la frente, son los lóbulos más grandes del cerebro humano. Los lóbulos frontales son sobre todo responsables de lenguaje que controla, de la función de motor, y de diversos procesos cognoscitivos incluyendo la timidez, humor, influencia, memoria, atención, así como razonamiento social y moral.
Dentro del lóbulo frontal es el área de Broca, que es responsable de la producción de discurso. Los lóbulos parietales, que se pueden encontrar cerca del centro del cerebro entre los lóbulos frontales y occipitales, son responsables de interpretar diversas funciones sensoriales y de memoria.
Los lóbulos temporales, que se refiere común como el neocortex, están situados cerca de la base del cráneo. Dentro del lóbulo temporal es el área de Wernicke, que permite que los individuos entiendan lenguaje hablado y escrito. Además de tramitar discurso, el lóbulo temporal también tramita la información sensorial que contribuye a la retención de memorias, de lenguajes, y de emociones.
El cuarto y final lóbulo del cerebro es el lóbulo occipital, que es el lóbulo más pequeño del cerebro y forma la parte caudal del cerebro. La función primaria del lóbulo occipital es la interpretación de la información visual.
El cerebelo
El Cerebelo
El cerebelo coordina estas señales de mantener el paso y la postura de seres humanos en el movimiento.
Aunque el cerebelo sí mismo no inicie la contracción del músculo, ayuda en el refinamiento y la exactitud de la actividad de motor controlando tono muscular. Además de su papel en equilibrio que controla y el movimiento de motor de regulación, el cerebelo también desempeña un papel en la regla del miedo y de otras funciones cognoscitivas tales como atención, lenguaje, y la reacción humana al placer.
La médula oblonga
El cerebelo y la médula espinal son conectados con los hemisferios cerebrales por el médula oblonga. El diencéfalo, que es la porción más superior del médula oblonga, se subdivide más a fondo en cuatro porciones que incluyan el epitálamo, subthalamus, el hipotálamo, y el tálamo.
El tálamo, que es la porción más grande del diencéfalo, sirve como punto del relevo para toda la información sensorial que entre la corteza y consigue eventual transmitido al cerebro para tramitar. El hipotálamo también tramita la información sensorial entrante; sin embargo, toda la información tramitada por el hipotálamo se deriva del sistema nervioso autonómico (ANS).
Como consecuencia, el hipotálamo mantiene hábitos alimentarios, comportamiento sexual, y configuraciones de sueño además de una temperatura del cuerpo de individuo que mantiene. Además, las secreciones de la glándula pituitaria, que se convierte de una extensión hacia abajo del hipotálamo, son controladas por el hipotálamo.
El midbrain, que conecta el diencéfalo con el puente de Varolio, movimiento ocular de los mandos, mientras que el puente de Varolio está implicado en la regla del aro y los movimientos, audiencia y equilibrio faciales, así como toda la información sensorial tramitados por los nervios faciales.
La médula oblongata, que está situado entre el puente de Varolio y la médula espinal y es por lo tanto la porción más inferior del médula oblonga, controla funciones autonómicas tales como respiración, presión arterial, ritmos cardiacos, y tragar.
PARA PROFUNDIZAR
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